miércoles, 30 de septiembre de 2015

Tema 4. El color y su reproducción en el tratamiento de imágenes.


1. Teoría del color


Una de las labores más difíciles es lograr que los colores mantengan cierta coherencia. Esto se debe a que el ojo humano es capaz de percibir una cantidad de colores considerablemente mayor que aquellos pueden reproducirse en papel. Ello nos obliga a esforzarnos para tratar de conseguir un nivel de reproducción de la mejor calidad posible. La teoría del color trata en gran medida de la luz y de cómo el ojo humano percibe los colores, además de cómo los describimos y gestionamos en pantalla y en impresión.

El color no es más que un produco de nuestra mente. El cerebro ve colores distintos cuando nuestros ojos perciben diferentes frecuencias luminosas. Sin luz no habría colores. La luz es un tipo de radiación electromagnética, igual que las ondas de la radio, pero de una frecuencia mucho más elevada y una longitud de onda mucho más corta. El ojo humano sólo es capaz de percibir una fracción limitada de estas frecuencias, que se denomina espctro visible. El espectro visible comprende desde los tonos rojos de alrededor de 705 nanómetros (nm) hasta los azules y violetas de alrededor de 385 nm y por supuesto todos los colores que se hallan entre ellos. Las longitudes de onda que se encuentran fuera del extremo rojo del espectro se conocen como ondas infrarrojas, que percibimos en forma de energía térmica. Las que están fuera del extremo de los violetas se denomina luz ultravioleta, con tal potencia energética que es capaz de broncearnos la piel.

Cuando nuestros ojos captan una luz que contiene la misma cantidad de todas y cada una de las longitudes de onda de la parte visible del espectro percibimos luz blanca.
Cuando la luz incide sobre una superficie, parte del espectro visible es absorvida por la superficie y parte es reflejada por esta. El color que vemos es el resultado de esas longitudes de onda que son reflejadas por esta. Podríamos decir por tanto, que la luz es “filtrada” por la superficie sobre la que incide. Por ejemplo el cesped durante el día se ve verde porque la superficie de la hierba refleja la fracción verde del espectro visible y absorve el resto.

2. Síntesis aditiva y sustractiva


La síntesis aditiva


La síntesis aditiva consiste en la mezcla de luces.
Los colores primarios en la síntesis aditiva son: ROJO, VERDE y AZUL. La suma de dos primarios a partes iguales nos origina un color secundario que se convertirá en color primario en síntesis sustractiva:
Rojo + Verde = AMARILLO
Verde + Azul = CIAN
Azul + Rojo = MAGENTA
La suma de los tres primarios origina el BLANCO. Rojo + Verde + Azul = BLANCO
Con la adición (suma) de todas las luces en partes iguales obtenemos la luz blanca, es decir la luz blanca contiene a todos los colores luz.
El color rojo se indica con la inicial R (red), al verde con la G (green), al azul con la B (blue) y al blanco con la W (white). Por eso los ficheros de imágenes digitales que están compuestas de tres documentos en síntesis aditiva se les denomina ficheros RGB.
El color complementario de cada primario lo podemos definir como el resto de luz que es absorbida por una superficie o filtro de color primario cuando es expuesta a la luz blanca, o mejor, como el color que le falta para ser blanco en el caso de la síntesis aditiva.
Rojo: su complementario es el Cian.

Verde: su complementario es el Magenta.

Azul: su complementario es el Amarillo.


La síntesis sustractiva


La síntesis sustractiva es la denominada de colores pigmento y la utilizaremos en el proceso de reproducción del color.
Los colores primarios en la síntesis sustractiva son: CIAN, MAGENTA y AMARILLO.
La suma de dos primarios a partes iguales nos origina un color secundario que se convertirá en color primario en síntesis aditiva
Cian + Magenta = Azul
Cian + Amarillo = Verde
Magenta + Amarillo = Rojo
La suma de los tres primarios origina el NEGRO (al utilizar tintas de impresión el resultado es un marrón y es debido a la contaminación de las tintas):
Cian + Magenta + Amarillo = NEGRO
La síntesis sustractiva se le denomina así porque sustrae color, de tal manera que la suma de los tres primarios nos da el negro que es la ausencia de color. Aunque esta síntesis también denominada de colores reflejados para existir requiere de la luz blanca para poder absorber o reflejar colores.
Al color cian se le refiere con la inicial C, al magenta con la M, al amarillo con la Y (yellow) y al negro con la K (black) se utiliza la k final. A los ficheros de imágenes digitales que están compuestas de cuatro documentos en síntesis sustractiva se les denomina ficheros CMYK.
El color complementario de cada primario en sustractiva lo podemos definir como el opuesto a ese color, como el color que le falta para ser negro.
Rojo su complementario es el Cian.
Verde su complementario es el Magenta.
Azul su complementario es el Amarillo.  

¿Cómo se consigue el color?


El proceso sustractivo del color se utiliza en la impresión de reproducciones en color sobre un soporte blanco, tal como el papel. Todo el color que ha de quedar visible en el papel ya está allí. El papel blanco es blanco porque toda la luz blanca que procede de su superficie se refleja de nuevo hacia los ojos humanos. Las porciones de luz roja, verde y azul forman conjuntamente la luz blanca.
En el proceso de impresión por cuatricromía, el color se crea en el soporte utilizando tres pigmentos transparentes, el cian, el magenta y el amarillo como filtros. Se identifican normalmente con las letras C, M e Y, correspondientes a las iniciales de esos colores en inglés. Cada uno de ellos absorbe un tercio del espectro visible y transmite los otros dos tercios.
En otras palabras, los pigmentos de tinta sustraen parte de la luz. La tinta cian absorbe luz roja. La tinta magenta absorbe luz verde. La tinta amarilla absorbe luz azul. Cuando la luz roja es absorbida, la luz verde y la azul se reflejan y el observador ve el color cian. Cuando la verde es absorbida, las luces roja y azul se reflejan y el observador ve magenta. Cuando la luz azul es absorbida, la luz roja y la luz verde se reflejan y el observador ve amarillo.
Las tintas absorben una porción de luz y el papel refleja las porciones no absorbidas hacia los ojos del observador. Téngase en cuenta que en el caso de los colores de la cuatricromía, el papel refleja la luz y no las tintas. Esto significa que la superficie del papel juega un papel importante en el aspecto del color.
Si cualquier par de tintas de la cuatricromía se imprimen conjuntamente, absorben dos tercios del espectro visible y crean entonces los colores secundarios o de superposición que son el rojo (R), el verde (Green, G) o azul (Blue, B). Si se imprimen una sobre otra las tres tintas, entonces se absorbe toda la luz y de hecho debería obtenerse negro.
No obstante, en la práctica, la superposición de los tres colores aparece en marrón. No es lo negro que debería ser. Por tanto, para obtener la suficiente negrura en las áreas oscuras, se precisa añadir la tinta negra. A la tinta negra se le asigna la inicial «K».
Las tintas de la cuatricromía no son colores puros. Por tanto, cuando se preparan las selecciones de color, se tienen que introducir algunas pequeñas correcciones para evitar esa contaminación no deseada.


Selección de color para la impresión


Los colores del original se dividen en los cuatro colores de la cuatricromía, CMYK. Esta información se modifica entonces para eliminar las imperfecciones del original, para adaptar la imagen a las condiciones de impresión y para cumplir con los deseos del cliente. Se crean los puntos de los medios tonos con sus distintos niveles de tamaño para que sean representativos y se preparan así las selecciones de color tramadas para la impresión.
Si se elaboran las cuatro selecciones tramadas directamente una sobre otra, se podría provocar un efecto desagradable consistente en una estructura por la coincidencia geométrica de los puntos que se denomina moaré. Para minimizar el moaré, se confieren unas direccionalidades o ángulos en cada una de las estructuras tramadas de los medios tonos de cada color. La posición angular de las tramas se acostumbra a situar a una diferencia de 30 entre los colores más fuertes en la impresión.
Normalmente, el amarillo, que es el menos intenso, se coloca con un ángulo de 15 de diferencia con respecto a sus vecinos. Al preparar las selecciones de color, el operador adopta esta disposición de ángulos, habitualmente cian 15º/105º, magenta 75º, amarillo 90º y negro 45º 















3. Atributos del color



El color tiene tres atributos importantes como son:
- Tonalidad
- Saturación
- Luminosidad.
Los tres deben ser controlados para disponer de una buena reproducción en color.
La tonalidad describe el tono de un color, identificándolo como rojo, verde, azul, cian, magenta, amarillo, naranja o cualquier otra descripción. La tonalidad es consecuencia de la longitud de onda dominante de ese tono.
La saturación describe la intensidad del color y su alejamiento del gris. Puede variar de muy intensa a muy débil. Un ejemplo en el cambio de saturación lo tenemos en la adición de pigmento a un vehículo de tinta blanco. Cuanto más pigmento se añade el color aumenta en saturación. La tonalidad no cambia pero la intensidad aumenta. Está relacionada con la pureza del color (a mayor saturación, mayor es la pureza del color).
La luminosidad describe la claridad u oscuridad del color y es independientemente de la saturación o tonalidad que tenga. Por ejemplo, un rojo muy saturado puede ser muy oscuro (como el vino tinto) o muy brillante (como una flor roja de geranio).





4. Cartas de color y bibliotecas


Si queremos imprimir un color de terminado pero deseamos hacerlo con una sola tinta, podemos recurrir a lo que se denomina color directo. Se utilizan cuando queremos imprimir ciertos colores difíciles de reproducir mediante la cuatricromía habitual o cuando queremos evitar el uso de tramas de semitonos con procentajes de colores de cuatricromía. Pantone y HKS son dos sistemas de colores directos. Se suelen usar para logotipos de empresa o para packaging.

El modelo se basa en la combinación de 9 colores distintos, seleccionados a partir de su frecuencia de uso y su tono. Cada una de las tonalidades del sistema se compone de una combinación determinada de esos nueve colores básicos. Los colores se distinguen mediante un sistema numérico. Comprende unos 114 colores diferentes. Esos números no nos permiten identificar el color y por ello se comercializan guías de color impresas. Pantone utiliza combinaciones únicas de pigmento, lo que significa que un amarillo claro usa un pigmento distinto que un amarillo saturado y por tanto no tienen que acudir a tramas para engañar al ojo. No todos los pantone son reproducibles con cuatricromía.












En los periódicos no se usan nunca pantones. Cuando se quiere reproducir el color de una marca se acude a los libros de conversión de pantone a cuatricromía. El resultado es algo difirente pero se suele aceptar, los que más cambian son los azules, verdes y anaranjados.

HKS es un sistema de color que igual que Pantone se basa en combinaciones distintas de combinaciones de distintos pigmentos para la obtención del color. Se emplea principalemente en Alemania. El HKS se basa en 88 colores físicos, cada uno de ellos con 39 matices, lo que suma un total de 3.520 colores. También existen guías impresas, para papel estucado y sin estucar, también llevan un código numérico.

5. Sistemas HIFI de color


Las tintas de cuatricromía no representan todo el espacio de color visible por lo que para compensar estas deficiencias nacieron los sistemas Hi-Fi color (High Fidelity). Usan de seis a ocho tintas para conseguir la impresión a todo color.
- Cian, magenta, amarilla, negra, verde, naranja, azul e incluso blanca.
Las gama de tonos reproducidos mediante este sistema son mayores que los obtenidos en cuatricromía.
El sistema más empleado es el que está basado en la impresión de seis tintas: cian, magenta, amarilla, verde, naranja y negra.
Debido a la utilización de más de cuatro tintas sería imposible su reproducción con las inclinaciones de trama convencionales (se produciría el muaré) por lo que es preciso utilizar tramas de frecuencia modulada o punto estocástico. El punto de trama utilizado con estas tramas es más pequeño y está desordenado.
Este sistema está reservado para trabajos de gran calidad cromática.
La utilización de la hexacromía aporta las siguientes ventajas:
- Mayor coincidencia con el original.
- Más detalle en la imagen.
- Imágenes más luminosas y sombras más brillantes.
- Mayor gama de tonos reproducidos.
- Reducción del trapping de impresión.
Aunque su utilización también comporta desventajas:
- Mayor coste de producción (incremento de fotolitos, formas e impresiones).
- Mayor tiempo de producción.

¿Qué es el trapping?

Cuando se hace una separación entre dos colores se corre el riesgo que se produzca un hueco blanco entre ambas tintas, este mal registro es inevitable, aunque se utilice una máquina de impresión de máxima calidad, las causas pueden ser porque el papel se mueve cuando se imprime, o las placas se desalinean, etc.






Esto se debe a que el espacio que ocupa el color de encima es exactamente del mismo tamaño del espacio que deja el otro. Entonces si se produce un pequeño error de registro se nota al instante. 
Existen dos formas de contrarestar este defecto:
Expandir el color claro (pantone 104) más allá del espacio asignado, para que al imprimir el color oscuro (pantone 266) solo utilice el espacio que le corresponde y así cubra lo que dejó sobrante el color claro (pantone 104).












Contraer el color de abajo (color claro pantone 104), para que al caer el segundo color (oscuro pantone 266) cubra lo que dejó de reserva el primero.








Aunque su utilización también comporta desventajas:
- Mayor coste de producción (incremento de fotolitos, planchas e impresiones).
- Mayor tiempo de producción.

No hay comentarios:

Publicar un comentario